Hachís: Efectos a corto y largo plazo

Adicción Hachís Málaga

Las flores de la planta del cannabis conforman la procedencia principal del hachís, que tiene en el THC (delta-9-tetrahidrocannabinol) su componente activo con mayor presencia. Los efectos del hachís a corto y largo plazo son de índole cognitiva y alteran sensiblemente a quien abusa de su consumo.

¿Cuáles son los efectos del hachís?

Algunos efectos positivos

Las consecuencias del consumo de hachís a corto plazo son más lesivas que positivas, si bien su inhalación produce una sensación de bienestar, inhibe el miedo y aumenta la percepción sensorial: concretamente, estimula áreas del cerebro donde se fomenta la creatividad.

También puede actuar como elemento relajante y paliativo del dolor: además, las personas que consumen hachís moderadamente afirman sentirse más desinhibidas y asertivas, por lo que encuentran más fácil la tarea de las relaciones sociales.

… y todos los demás, negativos.

Sin embargo, la mencionada alteración sensorial puede llegar a tornarse muy distorsionada, así como sufrir problemas motores (coordinación y reflejos) y sumirse en un estado de depresión constante y somnolencia aguda.

Paralelamente, es muy frecuente sufrir taquicardias, problemas de corazón, alteraciones gastrointestinales, incremento de la presión sanguínea, ataques de ansiedad y alteraciones respiratorias, como otros efectos secundarios del hachís.

Efectos secundarios el hachís a largo plazo.

Alteraciones del estado de ánimo

Las consecuencias de fumar hachís a diario durante temporadas prolongadas son sensiblemente más graves que las que se dan con mayor inmediatez tras su consumo: los cambios repentinos en el estado de ánimo se convierten en la tónica habitual del consumidor prolongado de hachís.

Se puede entrar con facilidad en una montaña rusa de emociones, en la que abundarán problemas emocionales tales como la apatía, la tristeza, la desmotivación…, y aparecerán brotes de ira espontáneos y sin motivo aparente.

 

Deterioros cognitivos y psicológicos

Por otra parte, existirá un evidente deterioro del área cognitiva en lo que se refiere a memoria, aprendizaje y secuencias de pensamiento, sin olvidar los problemas de disfunción sexual (por una menor producción de testosterona).

Por si fuera poco, dos de los efectos secundarios más graves del consumo de hachís a largo plazo son la alta propensión para sufrir trastornos psicológicos (psicosis, depresión, esquizofrenia…) y presentar una resistencia menor ante enfermedades comunes (como un simple resfriado).

Tendencia a la desidia

Es, quizá, el rasgo más característico del consumo prolongado de hachís: la tendencia a mantener un estado de ánimo desidioso, despreocupado, carente de motivaciones y de estímulos, se vuelve algo habitual en el día a día del consumidor de hachís.

Esta característica constituye un caldo de cultivo para multitud de problemas personales, familiares o laborales, incluida la ausencia de la propia iniciativa para abandonar definitivamente el consumo de hachís: la voluntad se ve sometida y la persona no es capaz de reaccionar.

Tratamiento adicción hachís en Málaga

La adicción al hachís: el pez que se muerde la cola

Si bien las consecuencias del consumo de hachís a corto plazo podrían no pasar a mayores (si se abandona a tiempo), el gran problema viene cuando el consumo se torna en habitual. El hachís es una droga que también crea adicción, puesto que altera la química del cerebro.

El hachís además de generar adicción a través de un proceso neuronal, también modifica la estructura del tejido cerebral. El mencionado THC tiene una elevada capacidad psicotrópica, y el cerebro se habitúa a su presencia dejando de generar dopamina de forma natural.

 

 

Quizá el mayor hándicap para abandonar el consumo prolongado de hachís estribe en el mono (síndrome de abstinencia), es decir, en la demanda del propio organismo para que se le siga administrando una sustancia a la que ya se ha habituado.

De hecho, los efectos positivos del cannabis (concretamente, los relacionados con el bienestar puntual y la relajación) contribuyen negativamente a que el consumidor de hachís desee abandonarlo definitivamente.

 

Los efectos a corto y largo plazo del hachís pueden resultar bastante nocivos para tu día a día. En Control Clinic, centro médico y psicológico de Málaga, estamos especializados en tratamientos de adicciones y en salud mental. Si notas que el consumo de hachís comienza a desembocar en algunos de los efectos secundarios mencionados, no dudes en pedir ayuda profesional.

Picture of Dr. Jose Caracuel

Dr. Jose Caracuel

Doctor en Medicina y Psicología

Facebook
Twitter
LinkedIn

Llámanos – Whatsapp

658 800 000

E-Mail

info@controlclinic.com

Domicilio

Calle Ayala, 1, Oficina 1, 29002 Málaga, España

Scroll al inicio