No. Pocas veces verás esta contundencia en cuestiones relacionadas con la salud, como cuando se habla de la posibilidad de dejar antidepresivos de golpe.
Si hilamos más fino, la respuesta a la pregunta formulada es que, dependiendo del fármaco, del paciente y de la dosis, podría poner en riesgo incluso su vida y, en cualquier caso, lo habitual al dejar pastillas antidepresivas de golpe y sin supervisión es sufrir un síndrome de abstinencia, que puede ser físico o mental.
Vamos a ver las consecuencias de dejar antidepresivos de golpe, es especial cuando es decisión unilateral del paciente, y cómo se realiza la retirada definitiva de estos fármacos de manera segura, evitando la abstinencia.
La abstinencia: síndrome de la retirada repentina de antidepresivos
La abstinencia ante la retirada de psicofármacos puede ser física o psicológica. Cuando hay abstinencia física es porque la persona se ha vuelto adicta a un fármaco, lo que implica cambios a nivel cerebral.
Hay antidepresivos que pueden causar dependencia física en algunos pacientes, aunque se lleva tiempo intentando trabajar solo con los que pueden causar la abstinencia psicológica acompañada de efectos secundarios físicos, que serán más intensos cuanto más brusca sea la retirada del fármaco o el cambio de medicación.
Síntomas
Los efectos secundarios al dejar los antidepresivos de golpe suelen ser una suma de síntomas físicos, abstinencia y posible recaída en la enfermedad. Los más comunes son los siguientes:
- Ansiedad, depresión, a veces hiperactividad.
- Sueños vívidos.
- Mareos y temblores.
- Cefaleas.
- Problemas digestivos.
- A veces, exceso de sudoración que coincide con los momentos en los que se acentúan los demás síntomas.
Tratamiento para la abstinencia de antidepresivos
El tratamiento para la abstinencia por la retirada de psicofármacos debe hacerse de manera adaptada a cada paciente y siempre en comunicación con el psiquiatra que ha prescrito el tratamiento y decidido que llega el momento de retirar la medicación.
Si tú piensas que ya estás listo para dar ese paso, consulta primero con tu psiquiatra. Tampoco está de más que cuentes con ayuda del entorno y, si la necesitas, de un centro especializado como Control Clinic para lograr el éxito a la primera.
Hablamos de primer intento porque no siempre se consigue dejar la medicación a la primera, incluso cuando se hace todo bien. Lo habitual es que el psiquiatra prescriba una retirada paulatina de los antidepresivos y, según el paciente y los efectos secundarios habituales en la retirada del fármaco utilizado, puede considerar necesario introducir de manera temporal una medicación de transición, para ayudar con los síntomas de la abstinencia.
Por otro lado, cuando se reduce la dosis de un antidepresivo o de cualquier otro psicofármaco, el paciente pasa a estar unos días especialmente vulnerable, tanto si experimenta síntomas como si tiene la suerte de no hacerlo. El apoyo del entorno y el contar con alguien que avise a tu psiquiatra en caso de que algo vaya mal y tú no seas capaz de detectarlo es fundamental.
Cómo dejar los antidepresivos de forma segura
Comunicación con tu médico o psiquiatra
Tu psiquiatra te ha acompañado durante el proceso de cura de la depresión y vuelta a la vida que tenías antes. Ahora te explica que ya puedes dejar la medicación o que la vais a reducir a una dosis mínima que podrías necesitar de por vida. Lo normal es que, pese a existir un alta clínica, puedas ponerte en contacto con tu médico o psiquiatra en caso de necesitarlo durante las primeras semanas tras la retirada, pues son decisivas.
Familia y amigos
Tendrán un papel determinante brindándote su apoyo y detectando posibles alteraciones en la conducta que podrían indicar una recaída o que todavía no era el momento de retirar el tratamiento.
No necesitas contarle a todo el mundo que vas a reducir o eliminar la medicación, ni siquiera a gente de tu entorno cercano, aunque sí es bueno que lo sepa alguien. En caso de no disponer cerca a nadie de confianza, si vives solo o si prefieres mantener una discreción absoluta, puedes acudir a servicios como el de tratamiento de la adicción a fármacos de Control Clinic.
A pesar de que nuestra terapia presencial en Málaga u online incluye el término adicción, al adaptarnos a cada paciente también llevamos casos de personas que lo pasan mal o temen no tener éxito en la retirada de un antidepresivo o ansiolítico. Contamos con médicos y con psicólogos para un abordaje conjunto.
Sé previsor
Cuando reduces o retiras un tratamiento antidepresivo es casi seguro que vas a sufrir algún síntoma, aunque sea una falta de concentración leve. También serás más sensible a ciertas situaciones estresantes, por lo que no te recomendamos que empieces a quitar los antidepresivos si en un par de semanas tienes un examen importante o estás comenzando un duelo.
Una vez decidida la fecha más adecuada para comenzar, ten presente que durante 3-4 semanas puedes rendir un poco menos mientras te adaptas a la nueva situación o necesitar más tiempo para hacer actividades relajantes.
No necesitas contarle a todo el mundo que vas a reducir o eliminar la medicación, ni siquiera a gente de tu entorno cercano, aunque sí es bueno que lo sepa alguien. En caso de no disponer cerca a nadie de confianza, si vives solo o si prefieres mantener una discreción absoluta, puedes acudir a servicios como el de tratamiento de la adicción a fármacos de Control Clinic.
A pesar de que nuestra terapia presencial en Málaga u online incluye el término adicción, al adaptarnos a cada paciente también llevamos casos de personas que lo pasan mal o temen no tener éxito en la retirada de un antidepresivo o ansiolítico. Contamos con médicos y con psicólogos para un abordaje conjunto.
Dejar los antidepresivos de golpe es temerario porque, en el mejor de los casos, vas a enfrentarte a la abstinencia psíquica y a ciertos efectos secundarios. La retirada, salvo casos excepcionales en los que se hace una sustitución, debe ser gradual. Hay antidepresivos que causan más adicción que otros, y lo mismo se puede decir de los efectos secundarios asociados a su retirada programada.
Para que todo salga bien y no recuerdes el proceso como algo traumático, necesitas el apoyo de tu entorno, de tu médico y, si precisas, de profesionales especializados.