Esquizofrenia y drogas: ¿Cuál es su relación?

Esquizofrenia y Drogas Málaga

La relación entre la esquizofrenia y las drogas es bastante directa: cuanto mayor sea el consumo de drogas, mayor riesgo existirá de que empeore el trastorno de esquizofrenia, contribuyendo a su cronificación. 

Esquizofrenia y drogas

La esquizofrenia está considerada una enfermedad mental grave, ya que incide sobre las funciones cerebrales relacionadas con la percepción de la realidad, la conducta, el pensamiento y las emociones: de hecho, está catalogada como un tipo de trastorno psicótico.

Cuando se es consumidor, es muy importante entender qué relación hay entre consumo de drogas y esquizofrenia, sobre todo si se conocen casos de esta enfermedad entre familiares cercanos.

 

En última instancia, la esquizofrenia se desarrolla por desequilibrios químicos en el cerebro, donde se alteran los niveles de dopamina y serotonina, unos neurotransmisores cruciales para las emociones.

 

Pero también puede existir cierta predisposición genética (hereditaria), y en estos casos, el consumo de sustancias estupefacientes o alcohol contribuyen a que exista mayor probabilidad de padecerla.

Otros factores que pueden desencadenar la esquizofrenia son el estrés, haber atravesado algún trauma severo, y estar sometido a una alteración sistemática de los patrones del sueño. No obstante, cuando la esquizofrenia es causada por las drogas, el cuadro se vuelve mucho más agresivo.

Esquizofrenia por cannabis

Un consumo excesivo de cannabis puede causar episodios transitorios de psicosis, ya que los cannabinoides se encargan de regular ciertas regiones nerviosas del cerebro: el sistema nervioso central se ve deteriorado a largo plazo.

El sistema cannabinoide propio de las personas regula la unión del glutamato con su receptor (NMDAr), y da lugar los procesos de la memoria y del aprendizaje: la inhalación de cannabinoides externos inhiben al receptor natural del glutamato, y exacerban el efecto de la dopamina.

En consecuencia, el cerebro, al tratar de revertir y compensar el desequilibrio, habilita mecanismos de liberación del NMDAr, lo que causa la desactivación del sistema neuronal, y puede desencadenar la esquizofrenia.

Los efectos a corto y largo plazo del hachís pueden resultar bastante nocivos para tu día a día. En Control Clinic, centro médico y psicológico de Málaga, estamos especializados en tratamientos de adicciones y en salud mental. Si notas que el consumo de hachís comienza a desembocar en algunos de los efectos secundarios mencionados, no dudes en pedir ayuda profesional.

Tratamiento Esquizofrenia Drogas Málaga

Esquizofrenia y drogas

Existe una clara comorbilidad (dos o más trastornos concurrentes) entre la esquizofrenia y el consumo habitual de drogas: las sustancias utilizadas pueden interferir con los efectos farmacológicos del tratamiento, o incluso agravar los episodios psicóticos.

Por ejemplo, el consumo de cocaína afecta a la alimentación del sistema nervioso central (irrigación encefálica), y al circuito de recompensa cerebral determinado por los niveles de dopamina: en este escenario, es muy fácil que se dé una disminución del metabolismo cerebral, lo que afectará a la secuencia de razonamientos lógicos, la memoria y el aprendizaje.


Así, suele ser muy complicado determinar el origen de los síntomas, ya que ambas patologías se podrían solapar. Un error muy común es tratar la esquizofrenia y obviar la adicción a las drogas.

En realidad, la mayor dificultad para una persona que se trata de esquizofrenia es abandonar las drogas, por la interferencia entre la química de las sustancias empleadas.

Los efectos a corto y largo plazo del hachís pueden resultar bastante nocivos para tu día a día. En Control Clinic, centro médico y psicológico de Málaga, estamos especializados en tratamientos de adicciones y en salud mental. Si notas que el consumo de hachís comienza a desembocar en algunos de los efectos secundarios mencionados, no dudes en pedir ayuda profesional.

Esquizofrenia y alcohol

El consumo desmedido de bebidas alcohólicas es uno de los factores desencadenantes y agravantes más fuertes de la esquizofrenia: una vez más, las redes neuronales sufren los efectos de una sustancia extraña y se alteran las funciones cerebrales.

De nuevo, la dopamina es la gran damnificada: este neurotransmisor, así como los receptores dopaminérgicos D2, se ven inhibidos por la ingesta excesiva de alcohol. 
Además, de nuevo se da la comorbilidad: las personas que sufren de esquizofrenia paranoide son más propensas a convertirse en adictas al alcohol, ya que lo utilizan como un tratamiento para disminuir los efectos secundarios de la enfermedad, cuando en realidad están «dando de comer» a quien le está haciendo daño.


También se han realizado estudios que demuestran una predisposición genética a tener niveles alterados de estos receptores y neurotransmisores, por lo que, si estas personas consumen alcohol en grandes cantidades, serán susceptibles de sufrir episodios de esquizofrenia más lesivos que quienes no presentan esta característica hereditaria.

Esquizofrenia y drogas guardan una estrecha relación: cocaína, cannabis, alcohol y, en general, cualquier sustancia extraña que altere los niveles de dopamina y serotonina, que afecte a la irrigación del cerebro y que bloquee la liberación natural de estos neurotransmisores y de sus receptores pueden ser desencadenantes de la enfermedad. Desde Málaga, en ControlClinic te ayudaremos a poner remedio a tus adicciones para que la esquizofrenia no tenga por qué formar parte de tu vida.

Dr. Jose Caracuel

Dr. Jose Caracuel

Doctor en Medicina y Psicología

Facebook
Twitter
LinkedIn

Llámanos – Whatsapp

658 800 000

E-Mail

info@controlclinic.com

Domicilio

Calle Ayala, 1, Oficina 1, 29002 Málaga, España

Scroll al inicio